Cf. «La revista», en El Comercio, 11 ene. 1858, 5550, 4, 1. Publio Valerio dijo haber visto en las comedias de Segura, «como en relieve, todos los defectos de nuestra sociedad», así como «los más nobles sentimientos del corazón» en sus dramas, y sugirió seguir con la edición de las obras de Márquez y Salaverry, «lo más distinguido que de estos años conocemos hasta ahora».

Cf. ibíd., 14 ene. 1858, 5554, 3, 3; 30 ene., 5569, 3, 3; 4 feb., 5573, 3, 4. Los Editores no dejaron de lamentar la falta de estímulos, dificultades editoriales, etc.; la segunda entrega saldría a principios de marzo, pero con la primera se pasaría el recibo por 20 reales, etc.; en efecto, aquella apareció el 6 mar. (Cf. ibíd., 6 mar., 5598, 3, 2). Entre los numerosos suscriptores estuvieron los editores de El Comercio Alejandro Villota y Manuel Amunátegui, su impresor José María Monterola, Benito Laso, Valentín Ledesma, Buenaventura Seoane, Ignacio Noboa, Juan Espinosa, Manuel Odriozola, Manuel Atanasio Fuentes, Juan Bautista Cortegana, y los más jóvenes José Antonio Barrenechea, José Antonio de Lavalle, Anníbal Víctor de La Torre, Eugenio Carrillo Sosa, Fernando O'Phelan, Juan Ezeta, Mariano Amézaga, Luciano y Luis Benjamín Cisneros y Juan Vicente Camacho (Cf. Segura, Manuel Ascensio: Teatro. Precedido de un prólogo [Lima: Imp. de La Juventud por Guillermo Guerrero, 1858], pp. 234-36).

Por haberse publicado en dos entregas, el libro tiene portadas al frente de toda la obra y de la primera entrega; la principal reza: TEATRO / DE / MANUEL A. SEGURA. / PRECEDIDO DE UN PRÓLOGO. / [alegoría] / LIMA. / IMPRENTA DE LA JUVENTUD, / POR GUILLERMO GUERRERO. / 1858. En 4.º, la primera entrega consta de VII + 110 p., y la segunda de 113-236 pp., ambas a dos cols.; aquella contiene el «Prólogo» de Palma (pp. III-VII) y las obras El sargento Canuto, La saya y manto, La moza mala y Ña Catita, y ésta El resignado, Nadie me la pega, Un juguete y La espía, así como la lista de «Suscriptores de esta publicación». Recibió intensa publicidad (Cf. El Constitucional [Lima], 3 may. 1858, 25, 98, 2, y eds. ss.).

Cf. «Prólogo», en Segura: Teatro (1858) cit., pp. III-VII. Véase también Feliú Cruz, Guillermo: En torno de Ricardo Palma (Santiago de Chile: Imp. «La Ilustración», 1933), II (Ensayo crítico-bibliográfico), p. 7.

Cf. «Preámbulo biográfico y noticiero» (Lima, oct. 1885), en Segura, Manuel Ascensio: Artículos, poesías y comedias (Lima: Carlos Prince, Impresor y Librero-Editor; 1885), p. V.

Cf. Sánchez, Luis Alberto: El señor Segura, hombre de teatro. Biografía y crítica (Lima: Editorial P. T. C. M., 1947, i. e. 1948), pp. 124-25. Segura, como Palma, también había empezado escribiendo dramas; éste, al recordar en el citado «Prólogo» que, «a pesar de la grata acojida [sic] que obtuvieron, no era este el género de literatura que estaba más en armonía con su talento», de seguro pensaría que otro tanto podría decir de sí mismo (Cf. «Prólogo» cit., p. VI). Por otro lado, Segura era un empleado de carrera del Ministerio de Hacienda, donde había llegado a Comisario de Guerra, y Palma, en el de Guerra y Marina, se desempeñaba como oficial 3.º del Cuerpo Político de la Armada; vale decir que para ambos la contabilidad era tarea familiar.

Cf. «Prólogo», en Segura: Teatro (1858) cit., p. III.

Cf. ibíd., pp. III-IV. Los subrayados son originales.

Cf. Reyes de la Maza, Luis: El teatro en México en la época de Santa Anna (México D. F.: Universidad Nacional Autónoma de México, 1979), II (1851-1857), pp. 5 y 14, donde leemos que los dramaturgos de ese país al promediar el siglo XIX sólo tenían la retribución de los aplausos; en el Perú, en cambio, ya tenían derechos económicos.

Cf. «Movimiento literario», en Leubel, Alfredo G.: El Perú en 1860 o sea anuario nacional... Política. Comercio. Estadística. Literatura. Industria. Agricultura. Primer año (Lima: Imp. de El Comercio, 1861), p. 273. El subrayado es original. Lavalle creía que el coloniaje había estimulado más esa tarea (Cf. ibíd., p. 274).